Hostil emerge la voz de los martires
Tiranizados en su enfermedad
Claman, rezan, con el veneno en el corazon

Concebiran la falsedad que pudre aun mas las heridas
Condenaran con ceguedad, firmes en su causa inducida

Lenguas de serpiente blasfeman su engaño
Su dulce frialdad no conoce limites
Alza su bandera la sublime ignorancia

Vientos malditos secan las lagrimas
Entes perturbados se aventuran dignos
Ironizando esta involucion

Con palabras cinicas buscaran ocultar
Lo evidente en su impulsiva confusion
La fobia generada contamina la verdad

Sin vacilar caera algun miserable
Para mitigar la cólera general
Dejando atras la causa del conflicto
Olvidándolo en las sombras

Con palabras cinicas buscaran ocultar
Lo evidente en su impulsiva confusion
Hundiendo el puñal nuevamente en tus ojos